Enciende velas perfumadas
Cuando entras en un spa, siempre huele delicioso, no abrumador (si lo han logrado bien), pero solo la fragancia suficiente en la atmósfera para que tu nariz entienda que es hora de descansar. Si su día de spa es durante los meses de invierno, las velas perfumadas también crean un ambiente agradable y le permiten mantener la habitación iluminada sin tener que encender una luz deslumbrante. La lavanda, la manzanilla, la rosa, el sándalo y el ylang-ylang son los olores perfectos para un día de spa.